Toda una fantasía - Emociones secuestradas - No me olvidarás
Toda una fantasía El empresario Sebastian Sinclair había accedido a ser vendido en una subasta benéfica. No le agradaba convertirse en el regalo de cumpleaños de alguna afortunada ricachona, pero, cuando vio a Brandi Sommers, solo pudo pensar en que ella le quitara el envoltorio. Brandi no podía creer que sus hermanas le hubieran regalado cinco días de ensueño en un romántico refugio para amantes. Tendría a un impresionante hombre a su disposición... para cumplir sus más secretas fantasías. Emociones secuestradas El mercenario profesional Dare Macintosh tenía una regla...