El ángel de Domingo
Angela llega a un pueblo lejano en medio de las montañas españolas y es tan alta, delgada y pálida que los lugareños creen que es un fantasma, un hada o un mantequero aterrador que, por las noches, les chupará toda la grasa de los huesos. No obstante, Domingo no lo cree así. «Soy Angela», le dijo cuando se conocieron, pero él creyó haber escuchado «Soy un ángel». Más tarde, se da cuenta de que, en realidad, ella solo le había dicho su nombre, pero para entonces todos ya la conocían como el ángel de Domingo. Esta es su historia de amor, pero no se reduce solo a ello, también...