Sueños de cristal
Se dice que todos tenemos un ángel de la guarda, uno que se nos es asignado desde antes de nuestro nacimiento y que debe velar por el bienestar de nuestra alma y cuerpo durante nuestra estadía en la Tierra. Elisa tiene uno, al igual que todos los demás, solo que ella cuenta con una peculiaridad: desde muy pequeña puede verlo y hablar con él. A pesar de que no siempre es sencillo vivir con alguien que te sigue a todos lados y te recuerda lo que no debes hacer, ellos han logrado de cierta forma armonizar y crear una especie de amistad. Sin embargo, de un momento a otro las cosas cambian....